Andrea: un puntada sin hilo en el modelo inexistente de la imaginación

Andrea: un puntada sin hilo en el modelo inexistente de la imaginación

El teatro es cuerpo en situación de un presente irrepetible en una relación única que se da entre el público y la escena. Todos y todas participamos, segundo a segundo, en cada función. La comunicación más explícita es la que se da del escenario hacia las plateas, pero además existe otro tipo de comunicación (a veces por contagio) entre el público: los momentos previos a la función; la fila antes de entrar; ese aire de sala llena; la vibración de los sistemas de aire; el aplauso contenido; la carcajada a destiempo, la risa nerviosa; el murmullo. Todo es presente cuando el cuerpo ocupa el espacio. Pero hoy nada de esto es posible. Las artes escénicas, tal como las conocimos, vienen buscando y adaptando actividades a las limitaciones que impone el distanciamiento obligatorio. La modalidad online y el uso de herramientas virtuales son los recursos conocidos: una forma de sostener y seguir creciendo en las diversas actividades que involucra el teatro. Como no sabemos cuándo vamos a volver a a llenar las salas (que en sí mismo implica un alto nivel de autogestión y complejidad no siempre exitosa) de las cuales viven y dependemos vitalmente miles de personas, les invitamos a ver esta obra online. Es la ópera prima de Marina Otero. En ella planta las bases de mucho de lo que hizo después. Les recomendamos que la miren con subtítulos, e invitamos a buscar un espacio – de ser posible otro que el de la mesa de trabajo – donde puedan cerrar las ventanas, apagar las luces, silenciar los teléfonos, y así entrar a su propia sala. Por Andrés Manrique, para ANRed.


Nota: el año de su estreno, en 2012, ANRed publicó una nota sobre la obra con una entrevista a su realizadora (https://www.anred.org/2012/10/05/un-camino-interior-hacia-donde-iluminan-las-tinieblas/. Ocho años después, y desde la virtualidad, insistimos en sus hallazgos. 

Ni bien nacemos empezamos a tener olor. Temprano empezamos a pudrirnos. ¿Cuál es la verdadera fecha de nuestro origen, y cuál será el principio de nuestro vencimiento? ¿Cuál es el momento en que un cuerpo se rebela para vomitar la conciencia anestesiada por la cultura?

El primer paso se da en el vacío

Hay quienes caminan hacia su muerte sin formularse estas preguntas. Hay quienes frotan lámparas toda la vida para que alguien aparezca. Están los que esperan y esperan. Y está Andrea. Panamericana colectora puente calle de tierra. Hay quienes nunca se suben a la autopista y quedan de espaldas al tránsito, al costado de la vida. Hay quienes sostienen que las respuestas están cerca e incluso están los que creen llevarlas adentro. Andrea no cree, pero en algún lugar de sí misma sabe que si no le abre al señor X para hacer lo que le proponga, nunca podrá despejar la incógnita. Por eso Andrea le abre y el señor X entra, la agarra del culo y le saca la ropa. Le dice que le chupe la pija, ella le baja la bragueta, le pone el forro y se la chupa. La pija del señor X se endurece y le dice que se la quiere meter; Andrea sube la cabeza y se la meten. El señor X acaba, se pone la ropa, y entra el señor X2. Mil y una veces repite la mecánica del vacío, como si la vida real estuviera en otra parte, como si la vida real fuera el fin de un montón de medios sin ningún sentido: su exceso la vuelve frágil.

Por más negras que sean

Será necesario romper capa tras capa para desmarcarse. Puede que nunca se aprenda a respirar. Romper la cáscara implica soportar el vacío. Quizá no se trate de patearlo, sino de hacerlo estallar para salpicarse y poder reconocerse en el propio olor a podrido. Por más oscuras que sean las bolsas no hay modo de ocultar los desechos. Aunque no la veamos, la basura crece en eso que llamamos con eufemismo de nariz europea “el cordón ecológico”, ese lugar donde van a parar las cosas gastadas, donde toda nuestra basura termina. Pero otro cordón, el umbilical, es eso que nos conecta al principio con la vida. El cordón al nacer se corta, pero el hilo invisible cose el “Casquito” al “Monstruito” de un cuerpo sin ombligo.

Andrea es comer sin masticar el pedazo de grasa fría que es nuestro último nombre.


Comprar entradas: https://publico.alternativateatral.com/entradas72476-rosetiencasa-presenta-andrea-archivo-2012-de-marina-otero?o=14

El vídeo estará disponible hasta el 29 de Agosto

Todas las fotos adjuntas son de Cecilia Kuska

Trailer ANDREA

https://drive.google.com/file/d/12mZ0_9BAPGY0RT82c0jKS5GZ6dqU5Eq3/view?usp=sharing

ANDREA (Archivo 2012), de Marina Otero

Andrea bailó toda su vida para no hablar de ciertas cosas. Cuando las palabras se acumulan, los órganos confiesan. Andrea fue la primera obra de Marina Otero, estrenada en el 2012. Se habían programado 14 funciones, pero en la décima función, Marina mató la obra y no la hizo más. El único registro audiovisual que queda es el de esa última función en la que Marina enterró al personaje Andrea, para luego darle vida a su más ambicioso proyecto: Recordar para vivir, en el cual se propone construir una obra inacabable sobre su propia vida. A medida que la intérprete y autora va creciendo, la obra se transforma en diferentes bocetos – obras.

Las tres obras que completan la primera trilogía son: Andrea (2012), Recordar 30 años para vivir 65 minutos (2015) y Fuck me (2020).

Después de 8 años, se podrá ver el registro de esa última función en la que Marina le puso fin a su primera obra, Andrea, desde #Rosetiencasa.


Ficha técnica:

ANDREA (2012)

Dirección | creación | interpretación: Marina Otero

Colaboración en creación: Agustina Soulé

Supervisión a la dirección: Juan Pablo Gómez

Asistencia de dirección: Agustina Soulé | Cecilia Kuska

Iluminación: Fernando Berreta

Vestuario: Agustina Bachanian

Participación en video: Nicolás Malusardi

Textos: Marina Otero

Supervisión en textos: Pablo Ramos

Música: Charles Aznavour, Lia Crucet, Chavela Vargas, Simón Diaz, Franz Liszt, Clint Mansell.

Edición & montaje musical: Hernán Calvo

Cámara: Mariana Di Vincenzo

Edición & montaje de video: Martin Berra

Fotografía: Cecilia Kuska | Lautaro D’ Amato

Diseño gráfico: Chris O’farrell

Registro audiovisual: Lautaro D’ Amato

Cámara: Lautaro D’ Amato | Pepe Peralta

Edición: Lautaro D’ Amato | Nadia Lozano

Digitalización de sonido: Felix Land

CORTO (2020)

Montaje: Nadia Lozano

Cámara: Francisco Ríos Flores

Digitalización de sonido: Felix Land

Subtítulos: Mariano de Mendonça

Dirección: Marina Otero