Más colmenas muertas en el Norte Cordobés
El fin de semana, en Alto de Chipión, Región de Mar Chiquita, el apicultor Federico García
encontró su apiario devastado por la fumigación. “Seguimos con esta situación, frente a la cual la provincia no da respuesta: lo poco que intervienen, genera un enfrentamiento entre agricultores y apicultores, cuando debería ser una relación de fortalecimiento mutuo”, explica Sergio Toranzo, consejero apícola en la provincia. Las fumigaciones para el cultivo extensivo no tienen control ni están declaradas, a pesar del pedido de los apicultores, que buscan que se implante un mapeo de puntos sensibles para la apicultura en la provincia. “Es un delito penal: hay muchas denuncias judiciales por el tema”. El referente habló del compromiso de la provincia de crear una Oficina de Coordinación Apícola para manejar estos temas: tras la evaluación de distintos curriculums, ya fue elegido un apicultor para estar al frente: Alejandro Sánchez. “La oficina es resistida y está tardando. Además, buscamos que nos den garantía de continuidad de la política en la gestión entrante de Llaryora”, explicó Toranzo que también agregó que ya se evalúa un nuevo plan de lucha.
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