Los decibeles de siempre

El lunes último, el intendente Briguera citó a los bares que realizan espectáculos con música en vivo, para reclamarles que respeten los 70 decibeles máximos permitidos en San Marcos. El motivo habría sido varias quejas asentadas en los libros municipales por parte de Tona Tomalino y el complejo Nailut. “El intendente se mostró con voluntad de mediar y solucionar el problema. Lo que pasa es que es difícil cumplir, porque vos medís y está en 60, pero cuando entran los caños o hay variaciones en los temas, pasa a 80 o 90 db…” Los bolicheros pidieron que se convoque una reunión con los músicos y sonidistas, que se concretaría en los próximos días.